Había una vez un niño al que le encantaba leer libros, cuentos y comics. Un día se levantó tranquilamente para ir al colegio y cuando se vió en el espejo se dió cuenta de que su cara y su cuerpo entero estaba formado por letras!!!! Se puso muy contento y se puso a cantar canciones que desconocía y podía contar historias infinitas a sus amigos sin apenas poder pensarlas, era como si su cabeza fuera una fábrica de palabras.....sin duda el niño letroso estaba contentísimo con su nuevo aspecto.
miércoles, junio 11, 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario